MADRID, España - El presidente del Barcelona, Josep Maria Bartomeu, y su antecesor, Sandro Rosell, han rehusado volver a dar explicaciones en la Audiencia Nacional sobre el fichaje de Neymar y se han remitido a las declaraciones que ya prestaron en este mismo tribunal hace un año defendiendo su legalidad.
Bartomeu y Rosell ratifican ante el juez la legalidad del fichaje de Neymar
El presidente del Barcelona, Josep Maria Bartomeu, y su antecesor, Sandro Rosell, han rehusado volver a dar explicaciones sobre el fichaje de Neymar.
Bartomeu y Rosell han comparecido este lunes ante el magistrado José de la Mata en calidad de investigados (imputados) en el marco de una querella presentada por el fondo inversor DIS, que se considera estafado, porque no cobró el dinero que le correspondía de derechos federativos de Neymar.
Esta es la segunda causa abierta en la Audiencia Nacional por el fichaje de Neymar en mayo de 2013, que, según las investigaciones judiciales, costó al Barcelona 83 millones y no los 17 que el club dijo en un principio haber pagado al equipo brasileño Santos (más tarde, en medio del proceso judicial, el Barcelona aumentó esta cifra a 57 millones).
Bartomeu ya dio en febrero de 2015 su versión sobre los hechos ante el juez Pablo Ruz en el marco de la primera querella, presentada por un socio del Barça, y un mes después hizo lo propio Rosell, en un procedimiento que acabó en un juzgado de Barcelona y está pendiente de juicio.
Este lunes, ambos han declinado volver a declarar para explicar el fichaje y han ratificado lo que en su día dijeron a Ruz, cuando Bartomeu defendió que los contratos eran legales, aunque dijo que él no se encargó de negociarlos, sino Rosell.
Este último declaró en la misma línea y añadió que se limitó a firmar los contratos que le dieron los servicios jurídicos del club, porque se fiaba de ellos.
Bartomeu y Rosell, a los que se atribuyen los delitos de corrupción entre particulares y estafa, no han hecho declaraciones ante los numerosos periodistas concentrados a las puertas del tribunal.
Sí que las ha hecho el portavoz del Barcelona, Josep Vives, quien ha afirmado que el club ha "hecho las cosas bien" en el fichaje y que no se le puede imputar "nada", porque siempre ha actuado "de una manera muy abierta y muy sincera".
También estaban citados este lunes los presidentes del Santos cuando se produjo la operación, Luis Álvaro de Oliveira y Odilio Rodríguez, aunque no han comparecido porque han pedido declarar desde Brasil por comisión rogatoria, si bien el primero ha alegado enfermedad para justificar su ausencia.
Quien sí ha declarado durante varias horas es el director general del Barcelona, Ignacio Mestre, en calidad de representante del club blaugrana, que también figura como querellado.
Según fuentes jurídicas consultadas por Efe, Mestre ha defendido ante De la Mata que, por lo que a él le consta, los contratos que sirvieron para fichar a Neymar fueron correctos, aunque ha matizado que no participó en la contratación, porque entonces era un mero socio.
Ha explicado que, cuando se negoció y se firmó el fichaje del brasileño, no tenía funciones directivas, aunque ha precisado que ahora los contratos se hacen de otra manera en el club.
Por la tarde ha comparecido el representante legal del Santos, en una ronda de declaraciones por esta nueva querella de DIS que continuará mañana, cuando se espera al propio Neymar a las cinco de la tarde.
El futbolista, denunciado también por la Fiscalía brasileña por evasión fiscal y falsedad documental, pidió a las autoridades en una entrevista emitida ayer por el programa Fantástico que "lo demuestren antes de decir tonterías".
Este martes están citados asimismo en la Audiencia Nacional los padres del jugador, si bien podrían no acudir, ya que han pedido declarar en Brasil, así como un representante de la empresa familiar de los Neymar, N&N.
DIS, que tenía el 40 % de los derechos federativos de Neymar, afirma que sólo percibió ese porcentaje de los 17 millones que el club dijo haber abonado por el brasileño, cuando el fichaje le costó, según se desprende de las investigaciones de la Audiencia Nacional en la otra causa, un total de 83,3 millones.
Cuarenta de esos millones los cobró Neymar por aceptar fichar por el Barça mediante un contrato simulado, un hecho que, según el juez, "podría haber alterado el libre mercado de fichajes de futbolistas y perjudicado también al querellante" al no haber podido DIS percibir más dinero por ofertas de otros clubes.