A unos días que El Salvador reciba a México, el ambiente alrededor del Coloso de Montserrat es prácticamente imperceptible.
Por:
TUDN
Imagen José Cabezas / Getty Images
Meterse al mítico y temido Estadio Cuscatlán es una de las peores experiencias que tiene México cuando visita Centroamérica. La casa de la selección salvadoreña es un inmueble en el que históricamente la selección azteca sufre.
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Sin embargo, a unos días que el Tri se mida a la ‘selecta’ por las eliminatorias mundialistas, la venta de entradas al Cuscatlán es prácticamente nula. La calentura por recibir a México no existe y hay pocos motivos de burla hacia los aztecas.
De acuerdo a medios salvadoreños, a tres días que se lleve el trascendental encuentro eliminatorio, solo se han vendido cuatro mil entradas para el partido.
Pese a que México ya está calificado al Hexagonal, atraviesa un complicado momento futbolístico tras la histórica goleada de 7-0 recibida en la pasada Copa América Centenario. Un triunfo salvadoreño pondría en jaque la estabilidad azteca de cara a lo que resta de eliminatoria.
Y más allá del gozo que generaría una debacle mexicana, un triunfo de El Salvador pondría a los centroamericanos con un pie y medio en el Hexagonal ya que su otro rival, Honduras, tendrá que visitar la Ciudad de México el siguiente martes.
La afición salvadoreña suele ser una de las más intensas contra el equipo mexicano, pero parece que en esta ocasión no existe tanta confianza en su equipo y en el hecho de derrotar a México.
