El racismo es un mal que aqueja al mundo entero y que en el futbol ha causado estragos, pero que, de alguna otra manera, también ha unido al gremio dentro y fuera de la cancha.
El racismo, un mal que une al futbol desde hace ya varios años
El tema discriminatorio racial ha inspirado al mundo del futbol a unirse y luchar contra este.
La muerte de George Floyd a manos de un policía estadounidense generó controversia a nivel global. Incluso, el mundo del deporte no se vio exento de dar aliento en estos momentos. Futbolistas, basquetbolistas, boxeadores y atletas de diversas disciplinas han manifestado su apoyo respecto al tema.
En el mundo del futbol, el racismo no es un tema ajeno. Jugadores de distintos equipos han manifestado su repudio al racismo al ser discriminados o saber de compañeros suyos que han sido agredidos.
Paul Pogba, uno de los futbolistas más seguidos en el mundo entero, mostró un mensaje en agosto del 2019, que conmovió e inspiró al mundo entero.
"Mis ancestros y mis padres sufrieron para que mi generación pudiera ser libre hoy, pudiera trabajar, coger el autobús, jugar al fútbol. Los insultos racistas son ignorancia y solo pueden hacerme más fuerte y motivarme a luchar para la siguiente generación", junto a una imagen de él con sus antecesores y su hija en brazos.
En días pasados, Pogba también se manifestó sobre el tema de George Floyd. En Instagram publicó una fotografía de él viendo al cielo, con el puño arriba. "Ya sea en el futbol, el trabajo, la escuela... ¡donde sea! Esto tiene que parar de una vez por todas. No mañana, no otro día, tiene que terminar ¡HOY!"
Incluso, en defensa de Paul, Marcus Rashford, jugador del Manchester United, también se hizo presente con un contundente mensaje: "Esto tiene que parar sí o sí. El Manchester United es una gran familia, y Paul pertenece a ella. Si lo atacas, nos atacáis a todos”.
Carlo Ancelotti, entonces técnico del Nápoli, manifestó que "el racismo no es bueno para nosotros ni para el futbol italiano". Incluso, tras los insultos a Kalidou Koulibaly en diciembre del 2018, el estratega consideró que existía una solición para erradicar las agresiones. "Hay que interrumpir el partido. Simplemente hay que pararlo a partir de varias llamadas de atención. Y si no se para, entonces la próxima vez seremos nosotros los que lo pararemos”.
Incluso, en noviembre del 2019, en el Inter vs Nápoli, Koulibaly volvió a recibir insultos desde la tribuna. "Estoy orgulloso de la calidad de mi piel. De ser francés, senegalés, napolitano: hombre”, manifestó.
En abril del año antes mencionado, Moise Kean fue víctima de insultos. Su entonces técnico, Massimiliano Allegri, manifestó: "Como es habitual, hay algunos imbéciles pero también personas normales. Los no civilizados deben identificarse con las cámaras y no deben entrar más".
También Romelu Lukau se hizo presente sobre el tema de racismo. En septiembre del 2019 publicó un conmovedor mensaje en sus redes sociales para manifestar que "durante el último mes, muchos jugadores han sufrido abusos racistas. Yo también los viví ayer. El fútbol es un juego para que todo el mundo lo disfrute y no deberíamos aceptar ninguna forma de discriminación que avergüence a nuestro deporte. ¡Espero que las federaciones de fútbol de todo el mundo reaccionen con fuerza en todos los casos de discriminación!”.
Para Raheem Sterling, jugador del Manchester City, la situación también ha sido compleja. En el juego entre Montenegro frente a Inglaterra, en marzo del año anterior, sufrió de racismo. "Yo personalmente no estoy de acuerdo con irme del campo. Ganar el partido les hace aún más daño. Solo están tratando de hundirte".
Al apoyo a Sterling se unió Callum Hudson-Odoi, jugador del Chelsea: "Cuando escuchas cosas como esas de los fanáticos, no está bien, es inaceptable y, con suerte, la UEFA lo maneje correctamente porque obviamente cuando fui allí, Rosey [Danny Rose] y yo oímos sonidos como de mono ‘ooh aah aah'”. Y, precisamente, la UEFA abrió un expediente sobre el caso en donde se acusó a cinco personas.
La lucha se mantiene, pero sobre todo, se acrecenta. Desde el lado de la FIFA, hay aplausos por las manifestaciones generadas por la muerte de George Floyd y, además, en ocasiones anteriores se ha hecho presente para rechazar el racismo dentro del terreno de juego.
Con el apoyo de diversos clubes, no solo para beneficio de los equipos, sino de la sociedad entera, se anhela culminar con el racismo en el mundo entero.