La maldición del futbol en Veracruz; un año y dos desafiliaciones

Hace un año Fidel Kuri fue desafiliado de la Liga BBVA MX junto con Veracruz p or falta de pagos a jugadores activos en el club y otros que ya habían salido. A pesar de la medida tomada por la FMF los problemas persisten y varios exempleados del equipo jarocho no han cobrado su dinero.

En el Clausura 2019 Veracruz firmó el descenso más rápido en la historia del futbol mexicano, pues en 11 jornadas ya no tenían qué pelear. Empataron a Zacatepec en cinco pérdidas de categoría y Fidel Kuri pagó 120 millones de pesos para permanecer en Primera División. De ahí vino un desfile de técnico y resultados mediocres.

Los adeudos empezaron, Memo Vázquez renunció e hizo pública la causa, mientras Kuri se burlaba de él en televisión. Juvenal Olmos, Siboldi, Enrique Meza y López Zarza consiguieron la cifra de 41 partidos sin ganar, récord histórico en el mundo tras rebasar los 32 del Derby County.

El Puerto de Veracruz se quedó sin futbol de Liga BBVA MX y aunque llegó la Liga de Balompié Mexicano con dos equipos, uno trajo consigo la mala fortuna y fue desafiliado: el Club Veracruzano de Futbol. El otro, Atlético Veracruz, se mantiene en competencia con los 10 clubes que restan en la LBM. Una luz de esperanza.

El Gobierno de Veracruz planea demandar a Kuri Grajales por adueñarse del mote Tiburones Rojos, mientras busca empresarios comprometidos a generar un proyecto a largo plazo que pueda regresar el futbol de alto nivel a Veracruz. El ejecutivo recuperó el Estadio Luis ‘Pirata’ Fuente, que tenía Fidel Kuri como propiedad.

Después de 365 días no hay un camino claro para el futbol veracruzano, que deberá conformarse con la LBM hasta que llegue un inversionista que pueda devolver el futbol de Primera División a una plaza apasionada e histórica.