Bob Bradley

    Con Salcedo e Insigne, Toronto FC mete miedo con un súper equipo

    En 2017 el equipo canadiense era amo y señor de la MLS, pero tras ser campeón ese año su reinado decayó, aunque en 2022 con su nuevo plantel y cambio de técnico, todo puede cambiar.


    Por:
    Christian Girón.


    Video ¡Todo comienza con un sueño! Carlos Salcedo, con la visión de ser campeón en MLS
    El nuevo defensa de Toronto FC, Carlos Salcedo, quiere sacarse la espina clavada de haber perdido la MLS Cup de 2013, nueve años después regresa a la MLS con la visión de ser campeón.
    3:16 mins

    En 2007 Toronto FC arribó de forma oficial a la MLS y desde entonces ha sido protagonistas de múltiples capítulos en la liga.

    Algunos tan llenos de gloria como cuando tras 10 años de lucha e inversión, se logró alzar con la MLS Cup en 2017, además fueron el mejor equipo de la temporada regular y se alzaron con el Campeonato Canadiense.

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    Pero desde ese año glorioso, algo cambió en el conjunto escarlata. Los éxitos deportivos se le han negado y aunque han conformado plantillas que han sabido competir, los campeonatos dejaron de llegar.


    Pero todo eso parece haber cambiado. Tras un decepcionante 2021, donde fue el segundo peor equipo de la MLS al acumular apenas 28 puntos en 34 encuentros, la directiva del club se puso manos a la obra para armarse de nuevo y revivir tiempos de gloria.

    El primer gran paso fue mantener al español Alejandro Pozuelo, MVP de la MLS en 2020 a pesar de tener ofertas por él desde Europa, y fichar a Bob Bradley.

    El experimentado coach será el encargado de devolverle la sonrisa a un club acostumbrado a competir y a ganar.

    Estratega perfeccionista, Bradley ya sabe lo que es campeonizar en la Major League Soccer, ya lo hizo en 1998 con Chicago Fire, y su periplo ganador también se vio reflejado con el Team USA al que llevó a ganar la Copa Oro en 2007.

    Bob Bradley llegó al conjunto canadiense tras no renovar su contrato con LAFC y en esta nueva aventura se espera que el veterano entrenador no traicione la fórmula que le ha caracterizado a lo largo de su carrera.

    UN ESTILO DE “JOGO BONITO”

    Durante la mayor parte de su carrera, Bradley ha impuesto un estilo dinámico y atractivo que produce goles y victorias.

    Mezcla juventud y experiencia, pero también paga cara su apuesta de presentar un fútbol ofensivo y vistoso con coertas debilidades en defensa.

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    “El Constructor”, como le dicen los expertos, llevó a LAFC en su primera temporada a batir el récord de puntos (72, New England Revolution impuso nueva marca, 73, en 2021) en una fase regular de camino a un Supporters’ Shield en 2019.

    En la temporada 2020 alcanzó la final de la Liga de Campeones de la CONCACAF. Se convirtió en el único entrenador de la MLS que ha vencido a tres rivales de la Liga MX en un mismo torneo.


    Si bien en ataque sus equipos son demoledores, en defensa muchas veces sufren, pero saben hacerlo.

    En cada plantilla que ha dirigido se ha rodeado de jugadores de su entera confianza, trata de contar con un arquero alto, pero con un buen juego de pies.

    Su base en defensa es con línea de cuatro y algunas veces modifica el estilo acorde al rival, poniendo tres centrales y dos carrileros volantes.

    Es también parte de la regla general en la mente de Bod Bradley armar un equipo de atrás hacia delante y colocar en puestos claves a elementos con experiencia y personalidad.

    En la zona medular por citar algún caso, siempre tiene un armador y uno o dos recuperadores de criterio con la pelota en los pies, que eviten los permanentes mano a mano de los zagueros con delanteros de sus oponentes.

    Le encanta achicar la cancha, que todo se desarrolle en el mediocampo para así aprovechar los espacios y jugar con el balón al piso lo máximo posible.

    Eso sí, culminar las jugadas con disparos o centros que no acaben en las defensivas rivales.

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    En ataque por ejemplo, siempre cuenta con un nueve existencial y cuando no lo tiene, apuesta por el falso nueve y dos mediapuntas que se rotan entre sí durante el desarrollo del encuentro, uno haciendo las veces de segundo delantero y otro un poco retrasado de su posición nominal.

    MICHAEL, SU HIJO Y FIEL ESCUDERO

    La llegada de Bob, no solo supone un cambio enorme en la etapa dirigencial de Toronto FC, también el reencuentro con su hijo Michael.

    Bob Bradley era el entrenador de MetroStars (ahora New York Red Bulls) cuando el equipo seleccionó a Michael, de 16 años, en la cuarta ronda, el elegido 36 a nivel global, del SuperDraft de la MLS 2004.

    Su camino juntos no inició bien, pues una dura lesión mantuvo fuera de las canchas a “Mike” durante 2004, pero al año siguiente disputó 30 duelos antes de que su padre fuera cesado de su cargo.

    Michael Bradley, trabajando a las órdenes de su padre.

    Imagen Toronto FC
    Michael Bradley, trabajando a las órdenes de su padre.


    Y 17 años después, vuelven a coincidir en un club, pues entre 2006 y 2011, su relación profesional se fortaleció en la selección de Estados Unidos.

    En algún momento Michael describió que parte de su desarrollo como jugador, se debe en gran medida a los consejos de su progenitor, pues fue él quien le hizo entender conceptos tácticos y básicos para ser un deportista de élite.

    Padre e hijo han sabido tener una relación cercana, es más Luca y Quinn Elle, hijos de Michael, llaman “Baba” a Bob y siempre que lo ven, tratan de demostrarle el talento que tienen con el balón en los pies.

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    Ambos se visitan cuando pueden, cuando las agendas de sus trabajos, entrenador y futbolista, se lo permiten y ahora compartirán a diario la dura tarea de devolverle a Toronto FC la gloria.

    La diferencia ahora es que Bob está plagado de experiencia y su hijo Michael, a quien dirigió profesionalmente por primera vez en 2005, ahora ya no es un prospecto, sino un líder maduro, un capitán admirable y que en esta nueva faceta, será su escudero dentro y fuera de la cancha.

    LLEGAN DOS ESTRELLAS, SE VA UNA LEYENDA

    Parte del proyecto que Bob Bradley liderará se basará en el poderío ofensivo que le aportará Lorenzo Insigne, y la solidez defensiva que trae consigo el fichaje del mexicano Carlos Salcedo.

    “Fui a Transfermartk y consulté la lista de la selección italiana que acababa de ganar la Eurocopa para ver qué jugadores terminaban contrato. Lorenzo Insigne era uno de los pocos que estaban por terminar contrato”, contó Bill Manning, presidente de Toronto FC como curiosidad al detallar la forma en cómo consiguieron dar con un talento vigente y con deseos de nuevos retos.


    “Queremos ganar la Liga de Campeones de la Concacaf y jugar el Mundial de Clubes y Lorenzo es un jugador que quiere jugar al más alto nivel, aspiramos a ser un equipo campeón”, agregó Manning.

    El italiano arriba como la bandera, el estandarte de una nueva era en Toronto FC. Su trayectoria avala la inversión financiera que hará el club por sus servicios.

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    Si bien llega libre en julio tras finalizar su contrato con el Napoli, el conjunto canadiense invertiría un total de 11,5 millones de dólares en su salario por cada uno de los cuatro años por los que firmó con el equipo.

    “Todos estamos deseando que Lorenzo se una a nosotros este verano”, dijo Bradley tras el anuncio de la llegada de Insigne.


    “Su habilidad para crear ocasiones para él y sus compañeros es especial. Habiéndolo observado durante muchos años, Lorenzo es el tipo de jugador que vienes a ver, porque siempre existe la posibilidad de que haga algo inolvidable”, agregó.

    Por su parte el ofensivo italiano afirma estar listo y ansioso de llegar y tener un impacto en el club.

    “Estoy contento por esta nueva aventura, le doy gracias al equipo”, afirmó Insigne al ser oficializado como refuerzo del club canadiense.

    EL ADIÓS A UN GUERRERO GOLEADOR

    La apuesta por Insigne es clave ya que el poderío ofensivo de los canadienses se había visto mermado debido al bajón en el rendimiento del que hasta la temporada 2021 fue su bastión en ataque, Jozy Altidore.

    El goleador estadounidense se despidió con dolor de la que fue su casa hasta la campaña pasada para trasladar sus celebraciones a New England Revolution bajo el mando de Bruce Arena.


    “Gracias Toronto y todos los fanáticos por siete años maravillosos. A todo el personal y mis compañeros de equipo a lo largo de este tiempo, ¡GRACIAS! Toronto siempre será mi hogar. Nos vemos pronto y todo lo mejor en el futuro”, publicó Altidore en sus redes sociales.

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    Jozy es el segundo máximo artillero en la historia de los canadienses con 79 tantos, solo es superado por el italiano Sebastián Giovinco, quien hizo 83.

    Pero parte de su adiós se debe también a su pobre producción goleadora, apenas seis dianas en las dos últimas campañas.

    Y a sus problemas con la definición se le sumó un enfrentamiento con el exentrenador del club, Chris Armas, quien lo apartó de la disciplina de equipo durante ocho semanas y pudo apenas retornar a entrenar con sus compañeros cuando Armas fue cesado del cargo en julio de 2021.

    Altidore, quien fichó por el equipo en 2015, ocupa el sexto lugar en partidos disputados con el equipo, acumuló 172 en todas las competencias.

    EL HISTÓRICO CASO DE CARLOS SALCEDO

    A la llegada de Insigne y a la salida de Altidore de Toronto FC, hay que sumarle el arribo de Carlos Salcedo.

    El defensa mexicano se desvinculó de Tigres para fichar por los canadienses en una transacción que según medios aztecas, sería de 3 millones de dólares.


    Pero lo más importante del pacto es que el zaguero fue contratado como Jugador Franquicia del club, algo poco habitual en la liga, ya que dicha etiqueta regularmente está destinada para mediocampistas y atacantes.


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    En el archivo de la MLS está el caso del también mexicano Rafael Máquez, quien en 2010 firmó como Jugador Franquicia para el New York Red Bulls, conjunto con el que no tuvo un gran rendimiento y con el que apenas disputó 50 partidos en todas las competencias en dos temporadas y media.

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