Tres partidos seguidos sin ganar en la Serie A, una final de Supercopa de Italia perdida y eliminado de la Copa Italia. Todo en el mes de enero. El Milan de Pioli, actual campeón del 'Scudetto', está en su peor momento y no pudo hacer nada ante una Lazio que exhibió su mejor futbol y se coloca tercero.
Lazio humilla al Milan y 'ayuda' a Chucky y Napoli
Los 'Rossoneri' se alejan del título en la Serie A y los capitalinos acortan distancia para subliderato.
Noche más que amarga para el Milan. Y feliz para el Napoli y el 'Chucky' Lozano, los mayores beneficiados de la goleada, más líder todavía. Los 'rossoneri' solo conocen una victoria en lo que va de 2023 y fue contra el modesto Salernitana. Si bien es cierto que mermado por las bajas de Theo, Maignan y de Tomori -durante el partido-, el conjunto milanista no dio ni la sensación ni los argumentos de estar en condiciones si quiera de pelear por el partido.
Fue superado de principio a fin por un Lazio que salió como un torbellino, decidido a dar un golpe sobre la mesa en el 'calcio' y demostrar que el buen hacer del equipo en el verde y de Sarri desde el banquillo no son fruto de la casualidad. Comenzó tan potente el conjunto 'biancoceleste' que, casi sin tiempo para que los aficionados tomaran asiento en el Olímpico de Roma, Milinkovic-Savic ya había hecho el primero en el minuto cuatro.
El golpe dejó bastante tocado al Milan, que mantiene la tónica habitual de los últimos dos meses, sin presencia ofensiva y con unos errores en defensa impropios de un equipo que aspira, como mínimo, a competir por entrar en Liga de Campeones.
Leao volvió a estar solo en ataque, bien marcado siempre, sin opciones de poder sacar a pasear sus virtudes, aislado de un Brahim Díaz desacertado que volvió a ser sustituido por De Ketelaere. Tampoco funcionó. De nuevo.
La débil zaga de los de Pioli aguantó hasta el minuto 38 achicando aguas, el momento en el que Milinkovic-Savic entró en el área y disparó al palo, dejando un rechace que aprovechó Zacaggni para dejar el partido encaminado antes del descanso.
No hubo reacción 'rossonera' tras la pausa. Está desorientado el Milan, desubicado, desprendido de toda la confianza que tuvo durante el campeonato pasado, en el que se sobrepuso en más de una ocasión a dificultades.
El Lazio fue lo contrario. Estaba fresco, se divertía ante su público y se propuso amortizar la entrada que habían pagado los espectadores a base de espectáculo y goles. Pedro volvió a ser un puñal apareciendo por todos los lados, generando superioridades, confusión entre los defensas milanistas e incluso un penalti que transformó su compatriota Luis Alberto en el minuto 67 para cerrar definitivamente el partido.
El 'mago' hizo honor a su apodo y, tras su gol, quiso regalar otro para completar una noche para el recuerdo de los 'laziali'. Filtró dentro del área para Felipe Anderson, que puso el cuarto de la noche. La cuarta cuchillada para un Milan que se desangra poco a poco, que se desinfla y que, con los octavos de 'Champions' a la vuelta de la esquina, necesita de regreso la mejor versión de sus mejores hombres.
Con el partido decidido, el Lazio siguió divirtiéndose con balón ante un Milan venido a menos, inferior y sin armas para frenar el baile que le estaban dando.
Los capitalinos recuperan su plaza europea, ascienden a la tercera posición por delante del Inter -que sucumbió ante el Empoli- y se colocan a un solo punto de la segunda posición que ocupa, por ahora, el Milan. El Nápoles, el mayor beneficiado del resultado, se coloca a doce de su perseguidor.