El polémico Pete Rose tomaba un descanso en el hotel MGM Grand, tras firmar algunos autógrados, cuando le preguntaron si apostar en el beisbol era peor que hacer trampa.
Pete Rose opina del escándalo de robo de señales de los Astros
Rose fue suspendido de las Grandes Ligas por realizar apuestas como manager de los Reds.
"No lo sé", comentó Rose a The Associated Press. "Todo lo que sé es que he estado suspendido por 30 años. No conozco a nadie que haya estado suspendido por 30 años”.
Sin embargo, 30 años alejado del deporte en el que era tan bueno parece ser un tiempo tremendamente largo, sobre todo cuando las Grandes Ligas y otras ligas deportivas han hecho las paces, y están haciendo negocios, con las casas de apuestas que publican las líneas de sus juegos.
Si le creen a Rose sobre los detalles de lo que hizo, sus apuestas no surtieron ni la décima parte del efecto que un sistema de robo de señales, el cual ha puesto en duda la legitimidad de no sólo uno, sino dos campeonatos de la Serie Mundial.
"¿Qué es peor, robar señales, ingerir esteroides o apostar en el béisbol?”, preguntó el que fuera líder de bateo en las mayores. "Las tres cosas son malas. Pero al menos lo que hice nunca tuvo nada que ver con el resultado del juego”, aseveró.
El escándalo que rodea a los Houston Astros sigue siendo nuevo, por lo menos públicamente. Hace una semana nadie se cuestionaba si habían ganado legítimamente la Serie Mundial de 2017, o si los Boston Red Sox lo hicieron un año después.
Ahora, todo está en duda y la discusión empieza a tomar un rumbo sobre si el escándalo de robo de señales está a la par de otros que han sacudido al deporte.