NUEVA YORK (AP) — Cuando se insinúa que los torneos de Grand Slam deben ponerle fin a los partidos de cinco sets para los hombres, Andy Murray seguramente se adhiere al bando contrario y más tras su victoria el jueves en la segunda ronda del Abierto de Estados Unidos.
US Open: El físico salva a Murray
Murray remontó una desventaja de dos sets al doblegar 5-7, 4-6, 6-1, 6-3, 6-1 al francés Adrian Mannarino, 35 del mundo.
Por octava vez en su carrera, el tercer preclasificado del torneo remontó una desventaja de dos sets al doblegar 5-7, 4-6, 6-1, 6-3, 6-1 al francés Adrian Mannarino, 35 del mundo.
Impreciso y vacilante al comienzo ante un rival zurdo, el escocés Murray arrasó en las tres últimas mangas, cediendo apenas cinco games.
Fue el cuarto día sucesivo que las temperaturas superaron los 32 grados (90 Fahrenheit) en las canchas de Flushing Meadows. Y la pesada humedad, sobre el 40%, también causó tormento al provocar dos nuevos retiros para igualar el récord de 14 tras las primeras dos rondas en un Grand Slam.
El estadounidense Jack Sock y el uzbeko Denis Istomin no pudieron continuar. Luego de ganar los primeros dos parciales, Sock, 28vo cabeza de serie, se retiró con calambres, casi desmayándose, en la cuarta manga de su partido ante el belga Ruben Bemelmans. Istomin paró cuando perdía en el tercer set ante el austríaco Dominic Thiem (20).
No se daban tantos retiros tras las dos rondas iniciales desde los 14 en el US Open de 2011.
Murray sacó a relucir su garra y, ante todo, su extraordinaria condición física para darle la vuelta a un partido ante un adversario que al principio supo esperar por los desaciertos del escocés.
"Fue una batalla muy dura", dijo Murray. "Le pega muy plano a la pelota y me complicaba con el efecto que le daba a sus golpes; me costó anticipar a dónde iba a darle".
Los partidos a cinco sets concitan la épica, pero en una era de paridad de las bolsas que se reparten en ambas ramas los días de esos maratones en las grandes citas están contados.
Sin embargo, no faltan los defensores de jugar al mejor de cinco.
"Para mí está bien", comentó el español David Ferrer, el séptimo cabeza de serie que tiene foja de 20-11 de por vida en duelos al máximo. "Es cierto que los mejores tienen más margen y a tres sets habrían más sorpresas".
Murray avanzó a la tercera ronda de una de las grandes citas por 30ra ocasión seguida y su rival de turno será el brasileño Thomaz Bellucci (30), quien superó 6-0, 6-3, 6-4 al japonés Yoshihito Nishioka para desembarcar en la tercera rueda del US Open por primera vez en su carrera.
En otro encuentro el jueves, el suizo Stan Wawrinka necesitó de tres desempates para despachar 7-6 2 (2), 7-6 (4), 7-6 (6) al surcoreano Chung Hyeon.
Además, la hispano-venezolana Garbiñe Muguruza, flamante subcampeona de Wimbledon, fue eliminada 7-6 (4), 6-7 (4), 6-2 por Johanna Konta, una británica que llegó al cuadro principal tras superar la ronda preliminar. El encuentro duró 3 horas, 23 minutos, el partido de mujeres más largo en el US Open desde que el torneo empezó a utilizar los desempates en 1970.
"Me voy conforme con la actitud que he tenido, porque he salido contenta del partido a pesar de la derrota y haber jugado regular", dijo Muguruza, novena preclasificada. "Me he sentido que me he vaciado en la pista y he dado todo lo que tenía".
Muguruza alcanzó al menos la cuarta ronda de los tres primeros majors del año, y perdió ante Serena Williams en la final de Wimbledon.
Tres de las cuatro finalistas de los Grand Slams de 2015 ya quedaron fuera del Abierto de Estados Unidos: la subcampeona de Australia, Maria Sharapova, se retiró por lesión, y la subcampeona del Abierto de Francia, Lucie Safarova, fue eliminada en la primera ronda. La única finalista restante es la mujer que las derrotó a todas en esas finales, Williams.
Además, la eliminación de Muguruza dejó al cuadro de mujeres sin seis de las 10 primeras preclasificadas.